Propamsa lanza un sistema sostenible de aislamiento térmico por el exterior para reducir un 30% la huella de carbono en edificación

PROPAMSA ha lanzado PROPAM ECOETICS®, un sistema sostenible de aislamiento térmico por el exterior cuyo panel se fabrica a partir de una materia prima que procede de la biomasa, permitiendo reducir en un 30% la huella de carbono y repercutiendo este en la construcción de los edificios.

Dicha materia prima se obtiene de los residuos vegetales procedentes de excedentes, limpiezas de jardines, ramas u hojas, y residuos de soja, maíz, trigo, cereales, etc., y es el primer monomaterial sostenible que proviene de recursos renovables y de biomasa vegetal, cien por cien reciclable.

Con este nuevo sistema, el primero de estas características que se lanza en España, se introduce un elemento innovador y sostenible dentro del ámbito del aislamiento térmico por el exterior (SATE) que, además, permite dotar a las fachadas de una estética natural, más acorde con las demandas actuales de arquitectos y constructores.

Por sus características técnicas los sistemas de aislamiento térmico mejoran el bienestar de los usuarios de las viviendas. Aportan una mayor resistencia al envejecimiento de los edificios, introducen una mayor amortiguación de impactos e impermeabilidad, aislamiento acústico y resistencia química, entre otras ventajas.

 

 

 

 

Con este lanzamiento, PROPAMSA refuerza así su apuesta por la eficiencia energética como objetivo a corto plazo en el parque inmobiliario español, en el marco de los Fondos europeos Next Generation, que supondrán una ayuda directa a la rehabilitación de edificios de más de 6.820 millones de euros.

 

 

 

 

Combatir el derroche energético

Para PROPAMSA, es el momento de apostar por el SATE, que será uno de los principales responsables de la mejora energética del parque de viviendas para 2030. Este sistema, como si de una piel impermeable se tratara, protege al edificio por el exterior regulando el intercambio de temperaturas y, por tanto, el derroche energético.
Al ser una instalación que se realiza por el exterior de la vivienda, no resta espacio –que con los sistemas tradicionales se ve reducido- ni tampoco requiere obras, por lo que se puede permanecer en ella durante su instalación. También aumenta el confort y la calidad de vida en casa, mejoran y modernizan la imagen de los edificios e incluso pueden revalorizarlos en más de un 20%, de cara a un posible alquiler o a una futura venta de la vivienda.
Según el responsable de Marketing del canal Obra de PROPAMSA, Manel Soler, “en los próximos tres años, según las previsiones del sector,  se espera abordar la mejora energética en unas  480.000 viviendas. Y hemos querido innovar con PROPAM ECOETICS® para añadir una solución sostenible de aislamiento por el exterior que mejore la eficiencia del parque inmobiliario”.

 

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